El capítulo 12 de Mateo presenta un conflicto entre Jesús y los fariseos respecto a la observancia del sábado. Cuando los discípulos de Jesús cosechan espigas en un día de reposo, los fariseos lo critican. Jesús responde recordando que el sábado fue hecho para el hombre, no el hombre para el sábado, y afirma su autoridad como Señor del sábado. A continuación, realiza milagros en el día de reposo, sanando a un hombre con una mano seca, lo que intensifica la oposición de los líderes religiosos. Jesús también enseña sobre el pecado contra el Espíritu Santo, advirtiendo que este pecado es imperdonable. Este capítulo destaca la confrontación entre la tradición religiosa y la verdadera intención de la ley, revelando la misión de Jesús de traer libertad y sanidad a la humanidad.
Mateo capítulo 12
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- Mateo 12:2
- Mateo 12:3
- Mateo 12:4
- Mateo 12:5
- Mateo 12:6
- Mateo 12:7
- Mateo 12:8
- Mateo 12:9
- Mateo 12:10
- Mateo 12:11
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- Mateo 12:18
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- Mateo 12:20
- Mateo 12:21
- Mateo 12:22
- Mateo 12:23
- Mateo 12:24
- Mateo 12:25
- Mateo 12:26
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