Eclesiastés inicia con la presentación de su autor, conocido como el Predicador, quien es identificado como el hijo de David y rey en Jerusalén. Tradicionalmente se cree que se refiere a Salomón, famoso por su sabiduría. Esta apertura establece el tono para la exploración de las complejidades y misterios de la vida que se desarrollan en el libro. Eclesiastés es un texto bíblico único que se adentra en preguntas existenciales, reflexionando sobre el significado y el propósito de la vida. Desafía a los lectores a mirar más allá de los aspectos materiales y temporales de la existencia, fomentando una búsqueda más profunda de sabiduría y entendimiento.
El título 'Predicador' implica un papel de impartir conocimiento y perspicacia, sugiriendo que las reflexiones que seguirán están destinadas a guiar e iluminar. El libro aborda temas como la naturaleza efímera de las búsquedas mundanas, la inevitabilidad de la muerte y la búsqueda de una satisfacción duradera. Al comenzar con esta introducción, el texto invita a los lectores a embarcarse en un viaje de introspección, instándolos a considerar qué es lo que realmente tiene valor en la vida. Llama a una examinación cuidadosa de las prioridades y la búsqueda de una existencia significativa.